Se secuestraron dos motos de dudosa procedencia y un arma de fuego. También se trasladó a dos personas mayores de edad.

La detención de dos personas mayores de edad, además del secuestro de dos motos de dudosa procedencia y de una arma de fuego, fue el saldo de una serie de allanamientos que la policía practicó hoy en la villa de San Pantaleón.

Fue minutos después de las 7 que medio centenar de uniformados “desembarcó” en el populoso sector emplazado detrás del Cementerio Municipal. De las acciones, tomaron parte agentes del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) y Cuerpo Guardia de Infantería (CGI), los que trabajaron bajo la supervisión del jefe de la Unidad Regional I, comisario inspector Adrián Ferrero.

Es de hacer notar que los policías no actuaron solos, sino que contaron con la colaboración de miembros de la Gendarmería Nacional, “quienes procedieron a realizar un perímetro de seguridad en el área donde se concretaron los operativos”, según consignó hoy el flamante nuevo jefe de la Agrupación Cuerpos, comisario Hernán Ferrero.

El funcionario indicó que “tal como se acostumbra, utilizamos el factor sorpresa para instalarnos en el campo de operaciones (en el fondo de la villa, casi en el límite con el reservóreo) donde, por fortuna, no hubo que lamentar ningún tipo de incidentes”.

Los allanamientos fueron motivados en el marco de una investigación por robo de motovehículos ocurridos recientemente, en una pesquisa que lleva adelante la sección Automotores.

Los actuantes requisaron dos fincas precarias desde donde secuestraron dos rodados. Se trata de una Motomel 150 cc y una Cerro 110. Ambos vehículos presentaban irregularidades en sus números identificatorios, por lo que se decidió su traslado hasta la dependencia policial.

También los agentes se incautaron de un revólver, calibre 22, con municiones, el que se encontraba sobre una mesita de luz.